El huevo, ese gran alimento e que todos tenemos en nuestra cocina, esconde secretos nutricionales que pueden transformar la alimentación de nuestros niños.
Más allá de ser una fuente de proteína económica y fácilmente accesible, el huevo es un verdadero superalimento para el crecimiento y desarrollo de los pequeños. Pero, ¿por qué es tan importante incluirlo en la dieta infantil?
La nutricionista Zulma Vichez nos ilumina con su conocimiento, destacando que el huevo no es solo una proteína de alto valor biológico, lo que significa que nuestro cuerpo la absorbe casi en su totalidad, sino que también es rico en ácido fólico y colina, dos minerales cruciales para el desarrollo cerebral.
La experta añade que frente a otros alimentos, como las proteínas de origen vegetal, el huevo se presenta como una opción superior por su completa absorción y por los nutrientes esenciales que ofrece en cada bocado.
Vichez nos indica que integrar el huevo en la dieta de los más pequeños, incluso antes del primer año de vida, es abrir la puerta a un desarrollo óptimo.
En un mundo donde la comida rápida y las opciones poco nutritivas abundan, el huevo emerge como un héroe, proporcionando en una pequeña porción, una alta densidad nutricional.
La nutricionista nos explica que a través de este enfoque se busca no solo nutrir el cuerpo de nuestros niños, sino también educarlos en la importancia de una alimentación consciente y saludable.
EL DATO
De acuerdo al Instituto Latinoamericano del Huevo (ILH), la colina es “necesaria para el mantenimiento de la integridad estructural de las membranas celulares, la función de señalización entre las células, la transmisión neuronal, para el transporte de lípidos y como donante de grupos metilo que activan diversas reacciones en el organismo”.
Sobre el ácido fólico, Medline Plus indica que es una vitamina B que ayuda al organismo a crear células nuevas.